El día que senti la vida crecer en mi interior...desde ese mismo instante una empieza a sufrir por el ser que en silencio crece y a la vez nos hace crecer...
Las dudas y miedos se amontonan en la cabeza y en el corazón...
¿estara creciendo sano? ¿sere buena madre? ¿podre darle todo aquello que en mi corazón siento que yo no tuve?
Dudas y más dudas...miedos y mas miedos... y a la vez la sensación de plenitud y felicidad que nos embarga a toda mujer que siente en lo mas profundo de su ser el milagro de la vida...
Cuando fui madre, fue cuando realmente empece a comprender a la mia...su vida, su historia, sus carencias, su sufrir y sentir..
Hoy desde la distancia del tiempo, en otro plano de conciencia y con la experiencia que me ha llevado hasta aqui, soy consciente de que en el mismo instante que una da a luz, ese momento en que la nueva vida te mira a los ojos... sientes el tierno calor de su cuerpo entre tus brazos y te conviertes en madre, es tambien el mismo momento magico en el que nos convertimos realmente en hijas...
Montse Marin Contreras
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